La mejora de la eficiencia del uso del agua en la agricultura gracias al IoT

El agua es clave para el sostenimiento y la reproducción de la vida, fuente fundamental del proceso biológico y elemento que en ámbitos como el agrícola se convierte en esencial, ya que de ella depende la seguridad alimentaria presente y futura.

Para ponernos en contexto, sólo en España, el 70 por ciento del agua que se consume se destina a la agricultura. Así lo señala uno de los últimos informes publicado por la Unesco, donde también se pone de relieve que esta cifra podría incrementarse hasta un 19 por ciento llegado el 2050. Un aumento debido, entre otros, a una población mundial creciente repleta de nuevas necesidades y retos, tales como el cambio climático y la cada vez más acentuada escasez de agua.

Para no ser testigos de un futuro en el que la insuficiencia de esta sustancia primaria sea la protagonista, es necesario actuar para promover el uso eficiente del agua en todos y cada uno de los aspectos de nuestra vida y entre ellos, el que se realiza de esta en el mundo agrícola y garantizando por consiguiente, la capacidad de producción de alimentos, así como de cultivos y ganados.

Es aquí donde entra la tecnología y la aplicación del Internet de las Cosas (IoT). Estas herramientas se convierten en fundamentales para mejorar la gestión del uso del agua, posible gracias a la implantación de dispositivos IoT interconectados y a los diferentes sistemas que pueden desarrollarse gracias a sus capacidades: desde sondas de humedad y conductividad de suelo a sensores de temperatura y humedad ambiente, pasando por las estaciones climáticas o modelos predictivos de lluvia.

Gracias a la conexión de estos dispositivos y a la comunicación que se produce entre ellos, el uso de una agricultura inteligente basada en el IoT permite a los agricultores reducir los insumos empleados en sus cultivos (agua, fertilizantes, etc.) y mejorar la productividad de sus explotaciones, favoreciendo un mayor control y monitorización de los mismos en tiempo real y por tanto un mejor uso de la eficiencia del agua. Además, el uso de dispositivos IoT mejora la automatización de procesos en las explotaciones, reduciendo el tiempo dedicado por los agricultores al estudio de sus cultivos, traduciéndose en un aumento de la producción y rentabilidad de sus terrenos.

Estos son solo algunos de los usos con los que se podría mejorar la gestión del agua gracias a la tecnología IoT, por ello, desde FIWARE ZONE apostamos por potenciarla, permitiendo desarrollar el sector agrícola hasta lograr una actividad cien por cien sostenible y eficiente, garantizando no sólo su sector, sino la vida de todos.