El IoT y su aplicación en la sanidad

Aunque el Internet de las Cosas (IoT) puede verse como una novedad, no es más que la evolución natural de una conexión entre dispositivos enlazados a la red que aplicado a sistemas como el que ofrece FIWARE ZONE, garantiza ventajas y aplicaciones casi infinitas que se adaptan a una sociedad que reacciona con rapidez.

El IoT no sólo tiene el poder de transformar entornos como el de la gestión de una ciudad, el mercado industrial o el agropecuario, sino que también puede aplicarse a un sector tan esencial para los ciudadanos como el de la salud. Aplicar esta tecnología en la sanidad posibilita que desde el primer momento de su puesta en marcha,  el sistema de los centros médicos sea más eficiente, inteligente y exitoso.

Hacer que los dispositivos de diagnóstico que componen el entramado de un hospital, clínica o cualquier otro centro sanitario estén automatizados y conectados entre ellos, permitiría:

  • Realizar una recopilación de datos referentes al estado de salud del paciente para ser analizados y aplicados en diagnósticos posteriores.
  • Identificación rápida y temprana de problemas que como consecuencia, no sólo mejoraría el proceso de memoria del paciente acelerando las esperas entre consultas, sino su propia calidad de vida
  • Gracias a la recopilación de datos anteriormente nombrada, se podría llevar a cabo una monitorización de la salud del paciente. De esta forma, se conocería detalladamente su fisiología y se realizaría una observación continua.
  • Optimización de procesos a través del desarrollo de nuevos servicios junto a los que además, se reduzcan costes y errores humanos, y se mejore la calidad de la atención
  • Sensores embebidos, dispositivos médicos como la resonancia magnética, portátiles y de control remoto, identificaciones electrónicas, etiquetas de localización, conectados entre sí a infraestructuras informáticas, serías los grandes emisores de flujos de datos útiles para todo el sistema sanitario.

Caso de Uso

En FIWARE ZONE lanzamos en 2018 la segunda edición de nuestro Challenge IoT en el que uno de los retos propuestos fue la monitorización y sistema de aprendizaje de las actividades básicas de la vida diaria que ayuden al diagnóstico precoz del deterioro cognitivo.

La solución a este reto consiste en una solución IoT para la monitorización de las personas dependientes, tanto en su domicilio como durante sus salidas de casa.

Su funcionamiento está basado en la inferencia de los hábitos y actividades cotidianas de las personas usuarias por medio de un conjunto de sensores desplegados en el domicilio, sensores usables (wearables) y algoritmos inteligentes que procesan estos datos y comunican a los familiares y/o cuidadores formales, las rutinas diarias que realiza la persona usuaria y las desviaciones de situaciones normales que pudieran ser indicativos de riesgos para su salud o seguridad.

Estos son sólo algunos de los ejemplos de lo que supondría la tecnología del IoT en la asistencia sanitaria sin por supuesto, dejar de garantizar la seguridad de los datos médicos confidenciales.